Elizabeth Catlett (1915-2012) fue exiliada de Los Estados Unidos por los temas políticos que exploró en su arte. Su legado es un de activismo que provoca conversaciones sobre el papel del arte entre los vecinos continentales de América: Los Estados Unidos y México.
"Ni de aquí, ni de allá" es un dicho común entre los latines vinculados a las naciones américa latinas y caribeñas que hablan español. La frase articula una sensación de desplazamiento que se produce cuando se comparte la pertenencia entre dos lugares y no ser plenamente aceptado en ninguno de ellos debido a esta hibridez. Por el contrario, Elizabeth Catlett, encontró la manera de ser "de aquí y de allá." Armonizó su identidad afroamericana con una identidad mexicana adoptada a través de su vida, su arte y su activismo, lo que resultó en un abrazo de sus dos hogares.
Elizabeth Catlett fue una artista y activista mexicana afroamericana que residió en México durante más de sesenta años. Catlett fue madre de tres hijos, criados en México, y antepasada a la generación de artistes que inspiró. Ella es citada como una de las artistas más influyentes del siglo XX y su legado se siente en Los Estados Unidos (EE. UU.), México y más allá. Su relación con México, donde produjo la mayor parte de su obra y desarrolló íntimas alianzas, ilumina una sinergia entre el arte, el activismo y la cultura mexicane y afroamericane. La vida y el arte de Catlett son un testimonio de la pertenencia cultural y la solidaridad entre los pueblos oprimidos.
Catlett nació el 15 de abril de 1915 en Washington, D.C., en el Freedmen's Hospital, conocido hoy como Hospital Universitario Howard. Sus abueles maternos y paternos nacieron esclavizados, una historia familiar que influyó su arte. Catlett supo desde muy joven que quería ser artista. Después de que la Universidad Carnegie Mellon anulara su ingreso en el programa de licenciatura debido a su raza, asistió a la Universidad de Howard y se graduó en Arte en 1935. En 1939, comenzó sus estudios de posgrado en Arte en la Universidad de Iowa, donde cambió su enfoque de la pintura a la escultura y se convirtió en la primera mujer en recibir una maestría en escultura de la Universidad. Durante sus estudios de posgrado en Iowa, su mentor, Grant Wood, la animó a "tomar como tema lo que mejor conocía". Catlett decidió hacer de los negres—especialmente de las mujeres negras—su tema principal.
Las obras de Catlett recogen sentimientos personales y políticos sobre las experiencias e historias de las mujeres negras. La maternidad es un tema constante a lo largo de su carrera, que comenzó en la escuela de posgrado. Su tesis de maestría en la Universidad de Iowa, una escultura de piedra caliza titulada Negro Mother and Child (Madre Negra y Niño) (1940), muestra este tema. En el documento de tesis que acompaña a la escultura, Catlett explicaba sus sentimientos al crearla: "Las implicaciones de la maternidad, especialmente de la maternidad negra, son muy importantes para mí, ya que soy negra y mujer". Varias de sus obras icónicas pertenecen a conocidas heroínas afroamericanas incluyendo Harriet Tubman, Phillis Wheatley y Sojourner Truth para conmemorar el legado activista de estas mujeres. Estas obras sobre heroínas afroamericanas formaban parte de la serie más famosa de Catlett, titulada "The Black Woman (La Mujer Negra)", que comenzó en 1946 mientras vivía en México.
Catlett forma parte de una red más amplia de solapamiento e intercambio entre artistes afroamericanes y mexicanes. Por ejemplo, el artista mexicano Miguel Covarrubias ilustró la portada del libro de Langston Hughes, The Weary Blues (Los Blues Cansados). Covarrubias fue uno de los principales muralistes de México y uno de los muchos artistes mexicanos que participaron en el Renacimiento de Harlem. Formó parte de un influyente colectivo de artistes en México, el Taller Gráfico Popular, al que se unió Catlett. Varios artistes afroamericanes, incluido Catlett, se interesaron por el arte y los movimientos sociales mexicanos.
Catlett y otros artistes afroamericanes trabajaron con y fueron aprendices de Diego Rivera, un líder del muralismo mexicano. Charles Alston se reunía frecuentemente con Rivera mientras Rivera creaba el famoso mural de 1934 Man at the Crossroads (Hombre en las Encrucijadas) en el Rockefeller Center de Nueva York. En 1940, Thelma Johnson Streat ayudó brevemente a Rivera en su mural Pan American Unity (Unidad Panamericana) en San Francisco. Su mural Medicine and Transportation (Medicina y Transporte) muestra paralelismos con el tema de la industrialización que suele aparecer en los murales de Rivera, pero añade una vitalidad abstracta característica de su estilo.
A principios de la década de 1940, Catlett estudió con Raúl Anguiano, uno de los fundadores del Taller Gráfico Popular, en la escuela La Liga de Estudiantes de Arte de Nueva York. Anguiano introdujo a Catlett en el método de trabajo en serie del Taller y esto alimentó su interés por visitar México. En 1946, Catlett viajó a Ciudad de México para aprender más sobre los murales públicos que poblaron la ciudad bajo un proyecto financiado por el gobierno tras la Revolución Mexicana para promover el orgullo, el nacionalismo y la industrialización. Este proyecto también motivó a varios de los artistes afroamericanes mencionados anteriormente a trabajar con artistes mexicanes y a visitar México. Muchos artistes mexicanes utilizaron sus murales para comunicar mensajes políticos.
Capturada por la energía artística, Catlett estableció su residencia permanente en México en 1947 y se unió al Taller. El Taller cultivaba el arte sociopolítico y compartía los sentimientos políticos posrevolucionarios del movimiento muralista. Los artistes del grupo utilizaban habitualmente grabados en madera y en bloque de linóleo, además de crear grabados en papel. Los artistes imprimían en papel barato y en grandes cantidades para facilitar la distribución masiva. Estos métodos económicos permitían que el trabajo de los artistes llegara a un público más amplio. La creación de un arte políticamente consciente y accesible era una creencia fundamental del Taller y compartida por Catlett. Trabajar con el Taller permitió a Catlett mezclar las técnicas mexicanes con la historia afroamericane a través de su arte. Además de crear la serie "The Black Woman (La Mujer Negra)” en grafito y papel en el Taller, utilizó la técnica de impresión en linóleo que aprendió allí para crear una de sus obras más famosas, Sharecropper (Aparcero).
Estas obras destacan la importancia histórica de las mujeres afroamericanas, pero curiosamente, utilizaron una técnica muy extendida en todo México en aquella época. Temáticamente, Catlett también exploró las dificultades de las poblaciones mexicanes, además de los afroamericanes. En el Taller, creó más de 70 obras, muchas de las cuales se centraban en las experiencias de las mujeres y los niñes mexicanes.
Nos preocupaban no sólo los problemas de México; los problemas de cualquier pueblo oprimido, colonial o semicolonial, nos preocupaban. Elizabeth Catlett "Elizabeth Catlett: An American Artist in Mexico" por Melanie Herzog (2005)
México y la cultura mexicana fueron parte integral del arte de Catlett; sin embargo, Catlett también se involucró en la vida y la comunidad mexicana fuera de las técnicas artísticas. Era activista. A finales de los años 50, fue arrestada en Ciudad de México por participar en la huelga del Sindicato de Trabajadores Ferrocarril. Catlett también se integró en la vida mexicana profesionalmente. En 1958, se convirtió en profesora de escultura en la Escuela Nacional de Bellas Artes de la Universidad Nacional Autónoma de México. Con el tiempo, Catlett se convirtió en directora del Departamento de Escultura, siendo la primera mujer en ocupar este puesto. Trabajó en la Universidad hasta su jubilación en 1975.
En 1962, Elizabeth Catlett se convirtió en ciudadana mexicana. Ese mismo año, fue declarada "extranjera indeseable" en EE. UU. por sus afiliaciones políticas con el Taller. EE. UU. declararon al Taller "organización de cara comunista" y prohibieron la entrada de sus artistes al país. No obstante, Catlett enviaba con frecuencia su obra a EE. UU. con amiges que la visitaban en México y sus obras fue solicitada para ser expuesta en EE. UU. durante su exilio. En una entrevista de 1971 en la que reflexionaba sobre su exilio, declaró con vulnerabilidad: "Es cierto que, desde el punto de vista legal, soy ciudadana mexicana; pero ¿cómo va a poder algún cónsul, algún embajador, algún burócrata, algún presidente, borrar el color de mi sangre, borrar mis veintitantos años de vida como ciudadana negra de EE. UU.? Donde fui a escuelas segregadas, donde viajé en la parte trasera del autobús reservada para los negres, donde me senté en las estaciones, en los teatros, en los restaurantes en la sección que decía ¡sólo negres!" En 1971, EE. UU. concedió a Catlett un visado para visitar el Studio Museum de Harlem para su exposición individual. Fue su primera visita a EE. UU. en 10 años. En 2002 se le restituyó la ciudadanía estadounidense, aunque vivió el resto de su vida en México.
Como mujer negra nacida en EE. UU. viviendo en México, Catlett era muy consciente de la demografía racial mexicane, específicamente de la invisibilidad de los mexicanes negres. A pesar de su red de artistes afroamericanes y mexicanes, Catlett no encontró comunidades de artistes que se centraran en la historia o la identidad de los mexicanes negres. Esta supresión se debe en parte al legado colonial de México y a los esfuerzos del gobierno del siglo XX por promover un sentido unificado de la mexicanidad basado en una identidad de mestizaje. Específicamente en México, mestizaje se refiere a la mezcla de ancestros indígenas y blancos europeos. Catlett llamó a la africanidad "la cultura madre de México" debido a la presencia de africanes en la antigua civilización olmeca de México. Se opuso a la supresión de la negritud y a la promoción del mestizaje. La fuerte presencia de la ascendencia africana en el arte mexicane la inspiró a menudo.

Negro es Bello II, 1969; printed 2001. Created by Elizabeth Catlett.
2014.108.1
Negro es Bello II muestra la dualidad de las identidades afroamericana y mexicana de Catlett. Los rostros que parecen máscaras africanes en esta impresión de tinta sobre papel de trapo incorporan la africanidad. Las hileras de panteras negras, un símbolo del Movimiento del Poder Negro de EE. UU., están colocados en círculos de color naranja pálido que parecen botones pines políticos. Estos círculos parecidos a botones alinean con los rostros que parecen máscaras blancas y negras. La frase "Black is Beautiful (Negro es Bello)" está en la circunferencia de los círculos. Basándose en el contexto hispanohablante en el que estaba inmersa, Catlett tradujo esta frase popular al español para el título de la obra. Negro es Bello II formó parte de la exposición individual de Catlett de 1970 en el Museo de Arte Moderno de Ciudad de México titulada Experiencia Negra. Esta obra fusiona sus identidades mexicana, afroamericana y negra; todas están entrelazadas.
La doble identidad de Catlett es aceptada y respetada. Su inclusión en la exposición seminal de 2006, The African Presence in México: From Yanga to the Present (La Presencia Africana en México: de Yanga al Presente) es un ejemplo. Esta exposición, aclamada por la crítica, viajó a cinco ciudades estadounidenses con grandes poblaciones negres y mexicanes, incluido el Smithsonian Museo Comunitario de Anacostia. La exposición incluso se exhibió en Monterrey y Veracruz, México. La inclusión de Catlett en esta exposición habla de su integración y su impacto en el arte y la cultura mexicana como afroamericana y como parte de la diáspora africana. En 2010, para celebrar el bicentenario de la independencia de México y el centenario de la Revolución Mexicana, el Instituto Cultural Mexicano de Washington, D.C., ciudad natal de Catlett, organizó una exposición sobre Catlett y sus obras.
En 2012, Elizabeth Catlett falleció en su casa de Cuernavaca, México, rodeada de su familia. Su legado se sigue sintiendo hoy en día. En 2019, el Museo Reginald F. Lewis de Historia y Cultura Afroamericana de Maryland rindió homenaje a Catlett con una exposición individual. Ha recibido el premio Logro de La Vida en escultura contemporánea del Centro Internacional de Escultura, el premio Leyendas y Legado del Instituto de Arte de Chicago, y doctorados honoríficos de la Universidad Carnegie Mellon (la misma universidad que le negó la admisión a la licenciatura) y la Universidad de Pace. Nueva Orleans, LA, la ha nombrado ciudadana honoraria y Berkley, CA, tiene una semana de Elizabeth Catlett.
Me inspiran los negros y los mexicanos, mis dos pueblos. Elizabeth Catlett Ebony Magazine, 1970
Incluso con sus prestigiosos reconocimientos, el mayor impacto de Catlett es su legado como artista que creó con audacia para sus "dos pueblos".
Explorar objetos en la colección NMAAHC creada por Elizabeth Catlett
Escrito por Marlin Ramos, Asistente Curatorial Latinx, 2021
Editado y revisado por la Dra. Ariana Curtis
Nota: Para ser tan inclusivos en el lenguaje como lo somos en nuestra colección, esta historia usa español genero neutral. Puedes aprender más sobre el uso de español genero neutral en esta historia con este recurso.